7 calles más famosas del Cusco: ¿cómo ir GRATIS?
Cusco es una ciudad repleta de historia. Caminar por sus calles es un paseo por la época inca, colonial y republicana. Por algo es considerado como ‘ciudad museo’. Por aquí y por allá se logran ver muros incas e inmensos templos coloniales. Recorrer este ‘museo’ al aire libre es gratis para todas las personas. Ni siquiera es necesario gastar dinero en taxi pues todas las calles están en el centro histórico de la ciudad y se puede llegar a pie. ¡Conoce las 7 calles más famosas del Cusco!
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Calle Loreto
Loreto es una de las calles del Cusco con más historia. De un lado destaca un muro de piedra que antaño fue el palacio del emperador Huayna Cápac. Este palacio se denominó ‘Amaru Cancha’ que significa en lengua quechua (Casa de la serpiente). Allí también se encontraba un ‘Acllahuasi’, hogar de las vírgenes del sol.
La calle Loreto debe su nombre a que durante la colonia al final de la calle (que da a la Plaza de Armas) se edificó la capilla de Nuestra Señora de Loreto. Su trazo original data de la época inca. Tiene una extensión de 231 metros por 4,5 metros de ancho. Une la calle Maruri con la Plaza de Armas del Cusco.
- Ubicación: En una de las calles que dan a la Plaza de Armas del Cusco (junto a la Iglesia de la Compañía de Jesús).
- Precio: Gratis (visita con guía turístico incluido en el Cusco Free Tours).

Calle Hatun Rumiyoc
Esta calle, también de origen incaico, posee un nombre quechua que significa ‘De la roca mayor’. Allí los incas edificaron el palacio del gobernante Inca Roca. En uno de sus muros destaca la famosa Piedra de los 12 Ángulos, un atractivos turístico gratis para todos. Allí además destacan decenas de puestos de artesanías.
La calles posee un trazado que data de la época inca. Mide 141 metros de largo y 3 metros de ancho. Comunica la Plaza de Armas del Cusco con la cuesta de San Blas (que lleva al barrio de San Blas). En Hatun Rumiyoc también se puede visitar el Palacio Arzobispal del Cusco y los talleres de famosos artesanos cusqueños como Mendivil, Olave, Mérida y más.
- Ubicación: En una de las calles que dan a la Plaza de Armas del Cusco (por la calle Triunfo) y la cuesta de San Blas.
- Precio: Gratis (visita con guía turística incluido en el Cusco Free Tours).

Calle Siete Culebras
Esta peculiar calle debe su nombre a que en una de las esquinas adyacentes se distinguen siete delgadas culebras. De origen inca, su nombre original fue ‘Amaru Ccata’ que, traducido del quechua, significa ‘Catorce culebras’. Esto debido a que a cada lado de la calle hay siete culebras.
Hoy a ambos lados de esta calle destacan el monasterio de Las Nazarenas y la iglesia de San Antonio de Abad, ambas de procedencia colonial. La calle mide 102 metros de largo por 2 metros de ancho. Allí se puede disfrutar de un ambiente sereno donde por aquí y por allá hay cusqueñas ofreciendo fotografías con llamas a los turistas.
- Ubicación: Une la plazoleta de las Nazarenas con la calle Choquechaka (que conduce al barrio de San Blas).
- Precio: Gratis.

Calle Cuesta del Almirante
Esta calle debe su nombre a que, durante la época colonial, allí estuvo la casona del almirante Francisco Alderete Maldonado. También fue hogar del virrey José de la Serna (el último virrey del Perú). Sin embargo, esta calle posee un origen inca pues en sus inmediaciones se edificó el palacio del emperador Huáscar.
Como todas las calles de origen inca, ésta es larga y angosta. Une la Plaza de Armas del Cusco con la Plazoleta de las Nazarenas. En las inmediaciones se puede visitar el Museo Inka, uno de los mejores de la ciudad. Allí estuvo la Casa del Almirante donde también se alojó el libertador Simón Bolívar durante los primeros años de La República.
- Ubicación: Une la plazoleta la Plaza de Armas del Cusco con la plazoleta de Las Nazarenas.
- Precio: Gratis.

Calle Cuesta de San Blas
La cuesta de San Blas, como su nombre indica, conduce a la plazoleta e iglesia de San Blas. De origen incaico, posee una pendiente de treinta grados aproximadamente. Alcanza los 119 metros de largo por 6 metros de ancho. A ambos lados existen tiendas de artesanías, hoteles y distintos servicios turísticos.
El barrio de San Blas posee una importancia histórica pues allí estuvo el templo al dios del trueno (Illapa). Hoy allí los españoles edificaron el templo de San Blas. Este barrio es famoso actualmente por su carácter bohemio Destacan las tiendas de famosos artesanos. Allí se reúnen los ‘mochileros’ de distintos países.
- Ubicación: Une la calle Hatun Rumiyoc (donde está la famosa Piedra de los 12 Ángulos) con la plazoleta de San Blas.
- Precio: Gratis.

Calle Resbalosa
Como su nombre indica, esta calle puede resultar resbalosa si no se toman las precauciones necesarias. Es una de las más empinadas de toda la ciudad. Posee una historia que se remonta a la época inca (es larga y estrecha como todas las calles incaicas). Su nombre original fue ‘Sikitakana’ que, traducido del quechua, significa: ‘Te golpeas el trasero’.
La calle Resbalosa une la Plaza de Armas del Cusco con la plazoleta de San Cristóbal (camino que conduce a la fortaleza de Sacsayhuaman). A ambos lados se distinguen viviendas de fachada blanca con el estilo del Cusco antiguo. Es un excelente lugar para conseguir fotografías inolvidables en el viaje.
- Ubicación: Une la Plaza de Armas del Cusco con la plazoleta de San Cristóbal donde está la iglesia del mismo nombre (ruta que lleva a Sacsayhuaman).
- Precio: Gratis.

Calle Cuesta de la Amargura
El nombre original de esta calle es ‘Macchuicata’, palabra quechua que significa ‘Calle de la amargura’. La razón de este particular nombre se remonta a la época colonial. Durante la construcción de los palacios y templos (como la Catedral), los españoles dejaban rodar por esta calle enormes piedras (traídas de Sacsayhuaman). Quienes se encargaban de contener las piedras eran los indios cusqueños que sufrían amargas lesiones, incluso la muerte.
La calle es en realidad un conjunto de doscientos peldaños adoquinados de piedra. Une la Plaza de Armas del Cusco (a través de la calle Tecsecocha) con la avenida principal que, a su vez, conduce a Sacsayhuaman. A su alrededor se puede visitar el mirador de San Cristóbal con vistas panorámicas de la ciudad. También se puede tomar el camino que conduce a la fortaleza de Sacsayhuaman.
- Ubicación: Une la Plaza de Armas del Cusco (a través de la calle Tecsecocha) con la plazoleta de San Cristóbal.
- Precio: Gratis.